El TAC de tórax es el método de elección para la correcta evaluación de los nódulos pulmonares. Nos va a proporcionar información sobre diferentes características del mismo, como: tamaño, márgenes, densidad, existencia de calcificaciones, grasa, cavitación, etc. También nos permite revelar la presencia de nódulos adicionales no manifiestos en la radiografía simple o evaluar adenopatías mediastínicas. Si sumamos los datos obtenidos a los proporcionados por anamnesis y exploración física, podremos clasificar el nódulo según su probabilidad de malignidad, lo que condicionará los pasos a seguir a continuación. Asimismo, en caso de que se precise una punción del nódulo, el TAC también ayuda en su planificación.

Resultados de la prueba