DIAGNÓSTICO FINAL: FIBROADENOMA
El diagnóstico histológico determinó que se trataba de un fibroadenoma mixoide. Constituye el tumor benigno de las mamas más común en mujeres entre 20 y 39 años, pudiendo presentarse a cualquier edad.
DISCUSIÓN RADIOLÓGICA:
Los fibroadenomas consisten en nódulos sólidos bien definidos, siendo la lesión benigna más frecuente descubierta en mamografías. El pico de edad de los fibroadenomas detectados clínicamente suele ser entre los 20-30 años, aunque pueden encontrarse a cualquier edad. No obstante, es infrecuente que aparezcan o crezcan después de la menopausia.
En el estudio mamográfico, pueden mostrar un contorno lobulado, aunque solo con unas pocas lobulaciones grandes. Son homogéneos, aunque con frecuencia se detecta la presencia de calcificaciones, ya que estas lesiones tienden a involucionar y calcificarse tras la menopausia, pudiendo seguir diferentes patrones. En ocasiones, las calcificaciones son indeterminadas, sin embargo, las calcificaciones típicas en relación con los fibroadenomas atróficos son grandes, groseras e irregulares.
Si no están calcificados, la mamografía no permite distinguir un fibroadenoma de un quiste, siendo necesario un estudio ecográfico para caracterizar el contenido sólido o quístico de la lesión. En la ecografía, los fibroadenomas se observan típicamente como masas circunscritas, sólidas e hipoecoicas.
En la mayoría de los casos no es necesario realizar una resonancia magnética, observándose aquí como masas lobuladas con realce lento y progresivo y septos hipointensos tras la administración de contraste IV.
Es importante comparar estas lesiones con estudios previos, para valorar si existe crecimiento de la lesión, lo que podría suponer la indicación de una exéresis quirúrgica.