DIAGNÓSTICO FINAL: Diverticulitis aguda
DISCUSIÓN
La diverticulitis aguda es la inflamación de un divertículo colónico a causa de su oclusión por heces o partículas de alimentos, lo que puede implicar una microperforación y una inflamación de la pared pericolónica. Un divertículo colónico es una hernia de mucosa y submucosa colónica que sobresale de la capa muscular. No contiene todas las capas del intestino, considerándose así un “falso divertículo”. Los pacientes con diverticulitis aguda pueden presentar dolor incesante en la fosa ilíaca izquierda, sensibilidad, distensión abdominal, fiebre y leucocitosis. La evaluación clínica por sí sola puede ser insuficiente en el diagnóstico inicial de diverticulitis, pero será necesaria evidencia radiológica de inflamación para el diagnóstico definitivo.
En general, el diagnóstico de diverticulitis se realiza de manera más fiable mediante tomografía computarizada (TC) que mediante una ecografía. Sin embargo, dado que la ecografía se utiliza a menudo como primera modalidad en el abdomen agudo, es importante estar atento a los signos ecográficos de diverticulitis. Su menor coste, la ausencia de exposición a la radiación y su gran disponibilidad son las ventajas más importantes de la ecografía en comparación con la TC.
La ecografía es más útil en la diverticulitis temprana y no complicada. Los divertículos aparecen como evaginaciones intestinales brillantes (también denominadas “orejas” brillantes) que muestran cierto grado de sombra acústica posterior debido a la presencia de gas o heces. La grasa pericólica que rodea al divertículo es ecogénica y no comprimible, sugiriendo un proceso inflamatorio de los planos grasos circundantes. A menudo, la inflamación se extiende al intestino produciendo un engrosamiento mural segmentario. Los criterios de diagnóstico para diverticulitis son: 1) al menos un divertículo, 2) signos de inflamación de la grasa pericólica y 3) pared intestinal engrosada > 4-5 mm. Son los mismos para la ecografía que para la TC.
Sin embargo, cuando la diverticulitis tiene un curso complicado, la TC es de mayor utilidad que la ecografía, especialmente en la detección de aire libre, hemorragia diverticular, peritonitis fecal o en la localización de abscesos intramurales o pericolicos (indicados por colecciones anecoicas). Asimismo, en pacientes obesos por lo general la TC funciona mejor. Finalmente, la TC, tiene un papel importante en el diagnóstico de afecciones alternativas (pielonefritis, úlcera péptica perforada, apendagitis epiploica, neoplasia maligna de colon, pancreatitis, etc).
Para las diverticulitis en el colon derecho (menos frecuentes), se ha demostrado que la ecografía las diferencia de una apendicitis aguda con una precisión del 100%. Por otra parte, la colonoscopia no se realiza durante la diverticulitis aguda. Sólo se realiza de 6 a 8 semanas después de que los síntomas hayan desaparecido para descartar cáncer de colon (por mayor riesgo en pacientes con diverticulitis). El tratamiento dependerá de una serie de factores, especialmente de las comorbilidades del paciente y el estadio de la enfermedad (diverticulitis complicada o no complicada).
En conclusión, aunque la TC es la modalidad de elección para el diagnóstico y la estadificación de esta enfermedad, con una sensibilidad del 94% y una especificidad del 99%, un estudio ecográfico específico puede caracterizar con seguridad esta dolencia.