La torsión testicular es una emergencia quirúrgica. Para llevar a cabo un diagnóstico completo emplearemos ecografía modo B y eco Doppler.
La ecografía modo B es el utilizado con mayor frecuencia en el diagnóstico por la imagen; las señales se muestran como una imagen anatómica bidimensional. El modo B suele utilizarse para evaluar el desarrollo del feto y evaluar los órganos, como el hígado, el bazo, los riñones, la glándula tiroides, los testículos, las mamas, el útero, los ovarios y la próstata. La ecografía modo B es lo suficientemente rápida como para mostrar el movimiento en tiempo real, como el de los latidos cardíacos o los vasos sanguíneos pulsantes. Las imágenes en tiempo real proporcionan información anatómica y funcional.
Al realizar la ecografía modo B podemos observar signos precoces (4-6 h): Normal, o datos inespecíficos como tumefacción del testículo, disminución de la ecogenicidad o signos tardíos (24h): Ecogenicidad heterogénea (hemorragia, infarto).
Al llevar a cabo la ecografía doppler (único criterio diagnóstico de torsión testicular), observaremos ausencia de flujo intratesticular unilateral (diagnóstico diferencial con la orquiepididimitis: aumento del flujo intratesticular y en epidídimo).