DIAGNÓSTICO FINAL: Apendicitis aguda perforada
DISCUSIÓN:
Ecografía abdominal: es la prueba diagnóstica de elección en estos casos ya que es no invasiva, rápida, fácil de realizar, utiliza ultrasonidos (radiación no ionizante) y de bajo coste, y en la mayoría de los casos, suficiente para el diagnóstico de apendicitis aguda. Además, permite relacionar el punto de mayor dolor con las imágenes obtenidas. En los casos en los que no se aprecia alteración del apéndice o no conseguimos identificarlo (puede que este se encuentre en posición retrocecal), se recurrir a la tomografía computarizada.
En este caso, sí que identificamos el apéndice y sí que se observa un apéndice patológico, este es, cuando es una estructura tubular de más de 6mm, no es compresible, doloroso a la presión y con sus paredes engrosadas.
A pesar de poder confirmar el diagnóstico de apendicitis aguda con esta prueba, debido a la clínica del paciente (se encontraba muy grave para ser una apendicitis aguda), se decidió realizar un TC para comprobar si existía una perforación del apéndice y, por tanto, una posible peritonitis que explicase los síntomas del paciente.
Tomografía computarizada: esta prueba es de segunda elección debido a que es de mayor coste y utiliza radiación ionizante. Aun así, su sensibilidad y especificidad para el diagnóstico de apendicitis son mayores.
En este caso se observa gas extraluminal, en forma de pequeñas burbujas de aire (hipodensas), que se corresponden con una perforación del apéndice.