DIAGNÓSTICO FINAL:

Apendicitis aguda.

DISCUSIÓN:

Las dos pruebas complementarias para el diagnóstico de apendicitis aguda son la ecografía abdominal y la tomografía computarizada.

Ecografía abdominal. La paciente presenta en el FID una estructura tubular terminada en fondo de saco, aperistáltica, no compresible en relación con apéndice que presenta espesor máximo de 11mm en su extremo distal y se acompaña de cambios inflamatorios de la grasa adyacente, compatibles estos hallazgos con apendicitis.

En este contexto, el método preferido es aquel que es seguro, no invasivo, móvil, económico y fácil de replicar, que ofrece resultados sobresalientes cuando es llevado a cabo por un profesional capacitado. Además, en la exploración abdominal, al ser una prueba en tiempo real, ofrece la oportunidad de hacer una correlación entre el tacto y las imágenes del área dolorosa para evaluar la causa.

En la mayoría de los casos donde se sospecha de una apendicitis aguda, la ecografía permite una buena visualización de esta estructura y sería suficiente para hacer un diagnóstico. Sin embargo, hay casos donde la ecografía no es diagnóstica o hay una discrepancia entre los síntomas clínicos y la imagen ecográfica negativa donde sería necesario un segundo examen complementario; en este caso, se usaría la tomografía.

Existen variaciones en la posición anatómica del apéndice donde puede estar en posición retrocecal y no ser visible en la ecografía por estar detrás del colon, como en este paciente. Al principio, ojos no entrenados podrían confundir las estructuras circulares cortadas en la imagen de forma transversal y longitudinal con el apéndice inflamado, sin embargo, si se observa cuidadosamente, ni el diámetro de las estructuras señaladas ni su ecogenicidad interna, están relacionadas con las características estructurales y anatómicas del apéndice patológico, por lo tanto, si después de varios intentos de visualizar el apéndice con el ecógrafo, este no se logra ver, no sería posible el diagnóstico. Por lo tanto, en estos casos, se debe recurrir a la Tomografía computarizada.

Este es un proceso en el que se utiliza una computadora vinculada a una máquina de rayos X para generar una serie de imágenes detalladas del interior del cuerpo. La razón por la que este examen es la segunda opción en este caso es debido a su mayor coste y a la exposición del paciente a la radiación. Sin embargo, es importante mencionar que la sensibilidad y la especificidad de la Tomografía Computarizada (TC) para el diagnóstico de la apendicitis en adultos es alta.

Se pueden examinar con mayor precisión el resto de las estructuras anatómicas que, debido a la profundidad o superposición, no se podían visualizar en la ecografía. Con este estudio, se puede establecer el diagnóstico de apendicitis aguda, ya que se observa este órgano inflamado y aumentado de tamaño.