DIAGNÓSTICO FINAL
Estenosis por ateromatosis complicada de la arteria carótida interna derecha
DISCUSIÓN
En caso de sospecha de ateromatosis de los troncos supraaórticos la prueba de imagen de elección es la eco-Doppler, al tratarse de una técnica menos dañina para nuestro paciente por no emplear radiación ionizante. La US doble, combina la eco Doppler y la ecografía en modo B. Esta permite estudiar características acerca del flujo arterial, como la velocidad de este en áreas de estenosis. Y por otra parte, permite visualizar características anatómicas y placas de ateroma, definiendo su homogeneidad, la regularidad de su superficie y la presencia o ausencia de calcificaciones. Además, nos permite el estudio del tamaño del complejo íntima-media, que se relaciona con el riesgo de presentar manifestaciones clínicas.
De hecho, en un estudio de varios servicios de angiología y cirugía vascular de España se ha concluido que, en la evaluación preoperatoria para llevar a cabo una revascularización carotídea, eco-doppler y angio-TC son similares en cuanto a sensibilidad y especificidad en el diagnóstico de estenosis superiores al 70%. Por ende, podría emplearse la eco-doppler como única prueba de estudio.
A pesar de ello, no podría usarse como única prueba de estudio preoperatorio en las siguientes situaciones:
-No está documentada la validación del laboratorio de diagnóstico vascular.
-Hay estenosis grave bilateral u oclusión
-Se trata de un estudio que no consigue visualizar adecuadamente la carótida interna distal.
La ecografía también nos permite estudiar las ramas de estas arterias, proporcionándonos información sobre signos indirectos de la arterosclerosis. Por ejemplo, en caso de oclusión de la arteria carótida interna, podría producirse la inversión del flujo de la arteria oftálmica homolateral, en caso de vascularizarse compensatoriamente a través de la arteria carótida externa. Aunque esto es extremadamente raro.
Además, puede observarse en la oftálmica un aumento de la resistencia y cambios en la velocidad de flujo.
En caso de ser necesario, se prefiere como segunda técnica de imagen el angio-TC a la angiografía. Dado que ambas presentan sensibilidad y especificidad similares. Sin embargo, la angiografía es más invasiva, ya que para realizarla es preciso hacer un cateterismo.
Como conclusión, la ecografía es la técnica de elección por excelencia en el diagnóstico de la arterosclerosis de troncos supraaórticos, debido a que supone un menor perjuicio para el paciente. Además, muestra las características de la pared arterial, mientras que las demás técnicas de imagen disponibles se centran más en las cualidades de la luz.