DIAGNÓSTICO FINAL: Enfermedad por depósito de HAC
DISCUSION
DEFINICIÓN Y ETIOLOGIA
La tendinopatía calcificada del hombro es una patología de origen desconocido, caracterizada por la acumulación de depósitos de calcio en los tendones del manguito de los rotadores. En el 80% de los casos afecta al tendón del músculo supraespinoso, el pequeño músculo del hombro que mantiene centrada la cabeza del húmero, con una localización intratendinosa. Es una enfermedad autolimitante que puede ser muy dolorosa y durar más de 6 meses. Non e’ ancora certo pero la teoria piu accreditata e’ quella associata al fallimento del processo di guarigione cellulare in cui le cellule staminali tendinee (tendon stem cells di seguito TSCs) giocherebbero un ruolo fondamentale determinando un’anomala differenziazione dei tenociti quando sottoposti a sovraccarichi meccanici (11). In circostanze normali infatti le TSCs sono in grado di differenziarsi in tenociti nuovi che permettono la riparazione e l’adattamento della struttura tendinea ai carichi. Invece in presenza di condizioni di sovraccarico locale, come ad esempio un eccessivo carico meccanico o l’accumulo di microlesioni, allora le TSCs possono differenziare in condrociti o osteoblasti al posto di rimanere tenociti. La diretta conseguenza di questo anomalia di differenziazione determina l’inizio del processo di condrometaplasia e ossificazione e quindi la formazione di depositi calcifici all’interno della struttura tendinea. Questa teoria sembra essere quella decisiva al livello istopatogenetico.
EPIDEMIOLOGÍA
Su frecuencia oscila entre el 7,5% y el 22% de los casos de tendinopatía del hombro y tiene una mayor prevalencia en el sexo femenino entre los 30 y los 50 años en la mujeres que son acostumbradas a trabajos manuales. Las calcificaciones simples o múltiples se localizan predominantemente en la zona insercional (entesis) o preinsertal (la llamada “zona crítica”) del tendón supraespinoso (alrededor del 80%), pero no es raro que las calcificaciones se localicen también en el subespinoso o en el tendón subescapular.
CLÍNICA
La tendinopatía es sintomática clínicamente en el 40% de los casos y el principal síntoma es el dolor. Los pacientes con tendinitis calcifica suelen tener un dolor muy intenso en la parte anterior o lateral del hombro, acompañado de rigidez y de una limitación general de los movimientos.
La molestia se intensifica cuando se realiza la acción de levantar el brazo por encima de la cabeza. Hay pacientes que se quejan de debilidad muscular general y malestar nocturno incluso cuando el brazo está en reposo.
EVOLUCIÓN
Puede presentarse en 4 fases: • Fase aguda caracterizada por mucho dolor y dificultad en el movimiento del hombro, con una duración de 1 a 6 semanas. • Fase crónica recurrente caracterizada por episodios agudos de dolor intercalados con períodos asintomáticos, con una duración de 6 semanas a 6 meses. • Fase crónica persistente caracterizada por dolor constante que se intensifica con el movimiento, con una duración superior a 6 meses. • Fase de deposición generalmente asintomática.
DIAGNÓSTICO
Para el diagnóstico de la tendinitis calcificada se indican los siguientes exámenes: • Generalmente, la radiografía del hombro es suficiente para diagnosticar la tendinitis calcificada. El examen, realizado en 2 posiciones, con el brazo rotado interna y externamente, mostrará depósitos de calcio en el manguito de los rotadores. • La ecografía del hombro puede ser útil para que el médico localice con precisión la calcificación. • La resonancia magnética puede proporcionar información sobre el estado del tendón, pero no es el examen de primera elección.
TERAPIA
Generalmente se resuelve con tratamiento farmacológico para reducir la sintomatología dolorosa porque con el tiempo debería resolverse. La fisioterapia puede ser utilizada para mejorar la movilidad de la articulación o, en cualquier caso, reducir la disfunción. Sin embargo, si el dolor se vuelve muy incapacitante. El tratamiento que se puede realizar en este caso es el tratamiento percutáneo llamado técnica Barbotaje o la terapia de ultrasonido. El primero consiste en pinchar las calcificaciones con una aguja para desintegrarlas y facilitar su desaparición, mientras que el segundo consiste en aplicar ondas de ultrasonido contra las calcificaciones también para desintegrarlas y facilitar su desaparición. Una de las diferencias es que este último tratamiento suele ser más doloroso que el primero.