Desde el punto de vista morfológico-radiológico, el análisis con TC del nódulo pulmonar incluye diversos aspectos tales como tiempo de duplicación, tamaño, contornos, contenido interno (calcificación, grasa, cavitación), vascularización. Además, los valores del coeficiente de atenuación de rayos X expresados en Unidades Hounsfield (HU) para los diferentes tejidos orgánicos en la TC, permite facilitar y establecer diagnósticos precisos en base a dicha diferenciación histológica.
Diagnóstico: HAMARTOMA PULMONAR.
Discusión
La radiografía de tórax es una prueba inicial imprescindible en pacientes con sospecha de patología torácica, pero no aporta la información necesaria y suficiente para según que hallazgos. La TC es la técnica radiológica que presenta mayor capacidad para detectar nódulos pulmonares, incluso aquellos de menor tamaño, omitidos o difícilmente identificables en una radiografía simple de tórax. Así, se incrementa significativamente el número de nódulos pulmonares detectados inicialmente. La correcta caracterización de un nódulo pulmonar evita procedimientos complementarios como la biopsia, que entraña riesgo de producir un neumotórax, derrame pleural, hemorragia, o proceso infeccioso, aumentando la morbilidad, ansiedad, inseguridad, molestias, gastos y aplicación de tratamientos innecesarios.
En el caso clínico que nos ocupa, diagnosticado como hamartoma pulmonar, la TC confirma la existencia de un nódulo solitario, con contornos bien definidos, densidad heterogénea y solidez (ventana de parénquima). Esta técnica es capaz de diferenciar la existencia de tejido graso en el interior del nódulo pulmonar (grasa = 40 a 120 HU; siendo la densidad aire=-1000 HU, agua= 0 HU, y hueso compacto = 1000 HU). Estos datos, tomados en conjunto, permiten diferenciarlo de otros posibles diagnósticos que sugieran malignidad, como una metástasis secundaria a liposarcoma o carcinoma de células renales, que también pueden contener grasa.
Otra evidencia diagnóstica de hamartoma es la presencia de calcificaciones centrales en “palomitas de maíz”; aunque en este caso no aparecen, el resto de características confirman el diagnóstico.
Uno de los parámetros a tener en cuenta es el tiempo de duplicación. Si el crecimiento del nódulo es lento o nulo se confirmaría nuevamente el diagnóstico de hamartoma. Para ello, es conveniente un control del nódulo en un año con una radiografía de tórax PA y Lateral, prueba diagnóstica suficiente y evitando dosis de radiación mayor sobre el paciente. Si la evolución del nódulo no fuese la esperada, se podría plantear realizar pruebas PET-TC, antes de realizar procedimientos invasivos de riesgo.