La resonancia magnética (RM) tiene un valor adicional en describir posibles complicaciones del colesteatoma, como la invasión de laberinto membranoso o la extensión intracraneana con afectación de tejido cerebral. Habitualmente se solicita una RM de cerebro con contraste (gadolinio), utilizado sobre todo con la secuencia T1. El gadolinio tiene un efecto paramagnético, que acorta los tiempos de relajación de los protones en T1 y T2, aunque el mayor efecto es en T1. Se ha reportado que las técnicas de difusión en RM (DWI) serían especialmente sensibles en la detección de colesteatomas de oído. Las técnicas de DWI con imágenes eco planares presentan con alta frecuencia artefactos de distorsión geométrica y susceptibilidad magnética que se acentúan al explorar la base de cráneo. En este paciente se realiza una RM en T1 con contraste, para ver el realce de la lesión en el cráneo, y una RM DWI (difusión) para diferenciar entre una otitis media crónica y un colesteatoma (quiste) y observar posibles complicaciones (infratemporales y extracraneales: mastoiditis, petrositis, laberintitis y parálisis facial; intracraneales: meningitis, empiema, absceso cerebral y tromboflebitis de senos durales).