Conclusión: recibimos a un paciente con síntomas específicos, pero de patología pulmonar. Solicitamos placa puesto que es la primera que se solicita (después ya vendrán TC, RMN o lo que se estime oportuno). En la placa encontramos un hallazgo patológico, pero no podemos terminar de definir que es. Por lo tanto le solicitamos un TC con contraste para tratar de afinar más nuestro diagnostico. En el TC vemos una masa que invade el parénquima pulmonar normal, la masa al tener un crecimiento tan rápido deja sin aporte de nutrientes a las células del interior por lo que acaban necrosandose y formando la cavidad que se ve en la imagen, eso sí la cavidad no está comunicada con los bronquios puesto que se interpone tejido tumoral entre la cavidad y los bronquios, mientras que si fuera una caverna tuberculosa, esta si respeta la arquitectura pulmonar (en cierto modo) y hay una comunicación entre la caverna y los bronquios.