La ecografía es la técnica de elección pediátrica, pues es una técnica no invasiva que no usa radiación ionizante. Aporta información sobre los riñones (número, tamaño, situación y características del parénquima), la vía urinaria (dilatación,duplicidad) y la vejiga (ureterocele, residuo miccional, engrosamiento de la pared, sedimento urinario). Es poco sensible para detectar cicatrices renales leves, reflujo vesicoureteral y pielonefritis aguda, por ello resulta útil el uso de técnicas de potenciación como power Doppler en este caso, aumentando así el rendimiento de la ecografía en el diagnóstico de la pielonefritis aguda, ya que en el caso de estar alterada por su alta especificidad evita la necesidad de la gammagrafía renal en fase aguda, considerada esta última técnica, capaz de identificar tanto lesión renal aguda (PNA) como lesión renal crónica (cicatriz), con sensibilidad muy superior a la ecografía. Además, el power Doppler o Doppler energía se caracteriza por ser más sensible para detectar flujos lentos y leves. Valora mejor los contornos de la luz del vaso y la vascularización tisular, aspectos importantes para el diagnóstico, que nos sirve para poder ver si la lesión localizada está o no perfundida.