Informe Angio-TAC: Pseudoaneurisma de gran tamaño (9 x 9 cm) dependiente de la cara anterior del tercio distal de femoral común derecha, muy próximo a la bifurcación. No presenta cuello. El orificio de salida es de varios milímetros. Presenta placas calcificadas alrededor del origen del seudoaneurisma. Femoral superficial, poplítea y vasos de salida permeables. Valorar cirugía.
DIAGNÓSTICO FINAL: Pseudoaneurisma de arteria femoral derecha.
El pseudoaneurisma puede definirse como un hematoma pulsátil que se comunica con una arteria a través de la adventicia o del tejido conjuntivo circundante en la pared arterial, y que está adherido a ella. De esa manera, se puede formar un cuello que comunica la arteria a una o más cavidades, permitiendo flujo sistólico en dirección a la cavidad y flujo diastólico en dirección a la arteria, a diferencia del aneurisma verdadero, cuyas paredes son las del propio vaso (6)En este caso, hay señal doppler positiva y con signo de ying-yan. El signo de ying-yan es altamente sensible y relativamente específico para el diagnóstico de aneurismas y pseudoaneurismas (3).
El signo del Yin-Yang se origina en las diferentes direcciones del flujo en la cavidad, que le otorga un aspecto arremolinado con un componente rojo y otro azul, que asemeja la forma del signo chino de la dualidad del universo. El estudio espectral demuestra flujo bidireccional y evidencia la conexión del pseudoaneurisma con el vaso arterial (4).
Los pseudoaneurismas corresponden a una complicación poco frecuente de una punción arterial, típicamente observada después de la cateterización para procedimientos angiográficos diagnósticos o terapéuticos; también pueden desarrollarse en relación a traumatismos (4).
La arteria femoral común corresponde a la vía de acceso más utilizada en procedimientos angiográficos, por lo cual, es el lugar donde más frecuentemente es posible observar pseudoaneurismas, aunque éstos pueden desarrollarse en cualquier vaso arterial (4).
Clínicamente se presenta como un aumento de volumen pulsátil asociado a equimosis, que puede ir aumentando de tamaño, en relación al sitio de punción (4).
Tanto con ecografía doppler como con Angio-TAC se ha evidenciado el diagnóstico diferencial. El tratamiento más indicado es la cirugía.