Justificación: En la imagen se observa una lesión hipoecoica en grasa subcutánea de mitad de muslo derecho, vascularizada en eco-doppler e hipoelástica (roja en elastosonografía por compresión y negra en ARFI cualitativo), que contacta con la fascia muscular sin aparente infiltración muscular.
Diagnóstico final: Linfoma subcutáneo.
Discusión radiológica.
Un linfoma es una proliferación maligna de linfocitos. Tiene una prevalencia que afecta a más de un millón de personas. El linfoma no Hodgkin está en continuo crecimiento.
Hay varios niveles:
Estado I: Afectación de una sola región ganglionar, o afectación localizada de un solo órgano o localización extralinfática. Los síntomas pueden incluir ganglios linfáticos agrandados, pérdida de peso inexplicable, fatiga, sudoración y falta de aliento nocturnos, tos, o problemas para respirar.
Estado II: Afectación de dos o más regiones ganglionares del mismo lado del diafragma, o afectación localizada de un solo órgano o localización extralinfática y su ganglio o ganglios regionales con o sin afectación de otras regiones ganglionares en el mismo lado del diafragma.
Estado III: Afectación de regiones ganglionares a ambos lados del diafragma, que puede acompañarse también de afectación localizada de un órgano o localización extralinfática asociada, o de afectación de bazo o ambas.
Estado IV: Afectación diseminada de uno o más órganos extralinfáticos, con o sin afectación ganglionar asociada, o afectación extralinfática aislada con afectación ganglionar a distancia. La afectación de médula ósea implica un estadio IV.
Los tratamientos convencionales incluyen quimioterapia, radioterapia, e inmunoterapia, o combinaciones de dichos tratamientos.
La ecografía ayuda a encontrar ganglios linfáticos aumentados de tamaño. También se usa la ecografía para guiar biopsias.