La técnica PET-TC nos permite evaluar el metabolismo del tumor. Por tanto, si son tumores malignos serán metabólicamente muy activos. En la imagen se aprecia el hipermetabolismo en la pared de la lesión pulmonar de centro necrótico.
DIAGNÓSTICO FINAL: Tumor de Pancoast
COMENTARIO:
El tumor de Pancoast es de tipo no microcítico maligno que se encuentra en el vértice pulmonar con extensión local hacia el plexo braquial inferior, cadena simpática cervical inferior y primeros cuerpos vertebrales y costillas. Cursa con dolor de hombro y síndrome de Horner. El diagnóstico se realiza principalmente con técnicas de imagen. La primera prueba a realizar es la radiografía simple de tórax en dos proyecciones (postero anterior y lateral), que en la mayoría de los casos evidencia la presencia de una masa en el vértice pulmonar. Si ante la alta sospecha clínica la radiografía de tórax es normal, habrá que recurrir a una técnica de imagen de mayor rentabilidad diagnóstica, como es la Tomografía Computarizada (TC). Una vez confirmada la presencia de una posible masa tumoral, se procede a un PET-TC para ver su alcance y un estudio anatomopatológico mediante biopsia. La técnica del PET-TC nos sirve para estadificar el tumor y ver posibles metástasis distales hacia ganglios linfáticos mediastínicos u otros órganos. Proporciona evidencia adicional de malignidad en tumores de al menos 10 mm con valores de sensibilidad y de especificidad de 79 y 91% respectivamente con mayor exactitud diagnóstica que la TC. También el valor principal que nos aporta frente al TC es la discriminación entre el tumor central y el parénquima distal con atelectasia o neumonitis obstructiva.
Para concluir, se trata de un tumor que generalmente se diagnostica en estadios avanzados (TNM: T3). Por lo tanto, antes de realizar la extirpación quirúrgica hay que valorar presencia de metástasis del SNC, mediante la realización de una TC o RM craneal. En los casos resecables el uso de la quimiorradioterapia combinada neoadyuvante seguido de la resección del tumor parece ser la mejor opción terapéutica. En estadios más avanzados, la terapia es más agresiva y la esperanza de vida apenas llega a meses.