DIAGNÓSTICO FINAL: NEUMONÍA EN LÓBULO SUPERIOR DERECHO.
DISCUSIÓN: La sintomatología y los hallazgos clínicos de la paciente (fiebre de 39º malestar general con expectoraciones de color oscuro herrumbroso) son característicos de un proceso infeccioso respiratorio agudo, el cual se interpreta como un Síndrome de condensación inflamatorio; se indica Rx. de Tórax posteroanterior (PA) y lateral en bipedestación como diagnóstico imagenológico para descartar Neumonía.
Rx. DE TÓRAX: La mayoría de los procesos del tórax van a precisar del apoyo diagnóstico de una técnica radiológica para su valoración; ya que son una herramienta fundamental en la evaluación de las patologías torácicas pulmonares, principalmente en los servicios médicos de urgencia. La radiografía de tórax constituye el examen imagenológico de diagnóstico inicial, debido a sus pequeñas dosis de radiación ionizante, su bajo coste, su fácil realización y su relativa buena sensibilidad que nos facilita la información suficiente para la valoración o utilización de posteriores estudios complementarias. En la radiografía de nuestra paciente se observa un aumento de la densidad pulmonar con presencia de infiltrado alveolar con radiopacidad de tipo algodonosa, con los limites mal definidos y presencia de broncograma aéreo en el lóbulo superior derecho.
TAC. DE TÓRAX: La tomografía axial computarizada (TAC) es la segunda técnica radiológica utilizada en el diagnóstico y seguimiento de las patologías relacionadas con el tórax; se decide realizar un TAC a nuestra paciente ya que dicha prueba de imagen nos informa sobre la localización de la neumonía, su extensión, permitiéndonos visualizar detalles finos dentro de los pulmones, su relación con un problema dentro de las vías respiratorias e identificar posibles complicaciones. En la TAC podemos observar una consolidación del parénquima pulmonar superior derecho con patrón en vidrio deslustrado y broncograma aéreo lo cual nos confirma el diagnóstico de Neumonía lobar derecha superior.
LA NEUMONÍA LOBAR o segmentaria es una infección bacteriana aguda caracterizada por lesiones de todo un lóbulo o un gran segmento del pulmón, afectando o comprometiendo a todas las estructuras pulmonares de dicha región; puede presentarse a cualquier edad siendo relativamente rara en los lactantes y en las edades avanzadas.
El microorganismo más frecuentemente asociado a una neumonía lobar es el neumococo (Streptococcus pneumoniae), causando cerca de un 80% de los casos. En pacientes con neumonía adquirida en la comunidad, la causa más frecuente de neumonía lobar son bacterias Gram positivas, mientras que en pacientes hospitalizados con neumonía nosocomial, el organismo más frecuente es la Klebsiella pneumoniae y la Pseudomonas.
Esta patología clásicamente presenta un cuadro clínico de inicio es brusco, con malestar general, temblor, escalofríos, fiebre de 39-41 grados y tos con expectoración; inicialmente de un esputo ligeramente turbio, acuoso correspondiente al estadio de congestión, seguido de esputo purulento- hemorrágico, el cual se denomina “herrumbroso» que es característico de la hepatización roja.
Las complicaciones pueden ir desde la recurrencia hasta la cronicidad, la necrosis del tejido pulmonar; la sepsis respiratoria, el derrame pleural, etc.
Usualmente esta afección se trata sin necesidad de internar al paciente en el hospital, esto se hará solo si el afectado tiene dificultad respiratoria u otras complicaciones que si requieran este tipo de cuidados más avanzados, por otro lado si no es el caso se utilizan antibióticos orales, hidratación y un cuidado especial en cuanto al entorno. El tratamiento más común es la penicilina, amoxicilina y claritromicina; en dependencia de la capacidad de resistencia de cada microorganismo causante de la enfermedad.