La prueba a realizar sería un TC de tórax puesto que es la técnica de elección cuando una radiografía torácica simple no resulta concluyente. Se considera la exploración óptima para muchos problemas clínicos de tórax debido a que ofrece mayor información de los órganos internos y revela detalles que pasarían desapercibidos o no podrían verse en una placa de tórax convencional. Las ventajas de la TC es que crea imágenes detalladas rápidamente y ofrece una mejor visión de las estructuras intratorácicas que las radiografías realizadas anteriormente; permitiendo, en este caso, dar el diagnóstico definitivo.