La respuesta es la d, ecografía. La ecografía nos permite identificar el contenido del nódulo en cuestión para una mayor certeza de su benignidad o malignidad (benigno si muy hipoecoico, maligno si su interior tiene partes hiperecoicas) además de medir el nódulo y ver en las sucesivas revisiones si el tratamiento funciona (si funciona, el tamaño se va reduciendo progresivamente).